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El requesón o cottage cheese, es un alimento saludable que armoniza muy bien con frutas, vegetales, cereales de grano entero y nueces. Es alto en proteína y bajo en carbohidratos, por lo que resulta una excelente alternativa para mantener un peso saludable. En las décadas de 1950, 1960 y 1970 el requesón se popularizó como ‘alimento dietético’. Sin embargo, en 2023 retomó su popularidad y aún sigue vigente. 

Este producto lácteo es un queso fresco suave, blanco y cremoso elaborado con la cuajada de leche de vaca. Para algunas personas, esa cuajada puede resultar desagradable por su textura. Pero una vez batido, el requesón es casi irresistible, lo que crea el escenario culinario perfecto para una variedad de platos. De hecho, actualmente la gente bate y licúa el requesón en un procesador de alimentos o licuadora, para obtener una consistencia suave.

Este queso logra sustituir el queso crema en muchas recetas, sirve como aderezo (dip) y como salsa para pasta y pizza. También es ideal para añadirlo a postres dulces, mousses, helados de frutas, tartas de queso, masas para galletas, entre otras recetas y alimentos. 

Las salsas preparadas con requesón batido son excelentes por varias razones. Su base de sabor suave se puede condimentar con muchos ingredientes sabrosos. Por ejemplo, ralladura de limón, hierbas frescas o secas, miel, chiles verdes y salsa picante. Esto permite que lo adaptes a tus preferencias y recetas. Además, las salsas son fáciles de preparar y combinan a la perfección con acompañamientos nutritivos como galletas de grano entero y vegetales. 

Perfil Nutricional del Requesón

En la sección de lácteos del supermercado encuentras requesón bajo grasa, reducido en grasa, sin grasa y entero. El único reto nutricional es su contenido de sodio. Algunas variedades pueden contener hasta 690 mg de sodio por servicio. Sin embargo, existen marcas que ofrecen opciones bajas en sodio o sin sodio.

1/2 taza bajo en grasa (1%) aporta 80 – 120 calorías, 12 – 19 gramos de proteína, 1 – 1.5 gramos de grasa saturada y 10 mg de colesterol. También provee carbohidratos (5 – 7 gramos), vitamina B2, vitamina B12, vitamina A, potasio, sodio, selenio y calcio.

Ayuda a controlar el apetito

Para el control del apetito se recomiendan alimentos ricos en proteína y muchos vegetales. El requesón tiene el efecto de saciedad por su contenido en proteína. Además, va bien con frutas y vegetales, que ayudan también a controlar el apetito. 

Mantiene la masa muscular

Las investigaciones sugieren que debemos consumir cerca de 30 gramos de proteína en cada comida. Esta cantidad nos ayudará a prevenir la pérdida de tejido muscular al reducir de peso o al envejecer. En ese particular, el requesón contiene el amino ácido esencial leucina, que estimula la formación o síntesis de proteína. 

Controla la glucosa en sangre

Al tener poca cantidad de carbohidratos, es una merienda perfecta para personas con la glucosa en sangre elevada o que están cerca de tenerla alta. En estas personas, es recomendable consumir el requesón bajo grasa ya que la ingesta de grasa saturada se ha asociado a la resistencia de insulina. 

Es versátil

Este queso provee una variedad de opciones saludables en tu menú diario. Añádelo a los pimientos o al apio (celery). Mézclalo con frutas, májalo con habichuelas blancas o úntalo a las galletas. Hornéalo con espinacas y pasta. En fin, puedes crear un sinnúmero de combinaciones saludables. 

Es conveniente

Es beneficioso para personas que están bastante tiempo fuera de su casa o viajando regularmente. Es una estupenda manera de comenzar la mañana. Puedes llevarlo contigo en una lonchera. También, puedes añadirlo a una variedad de recetas deliciosas, dándote el impulso de proteína en el almuerzo, cena o meriendas.

A continuación, una receta sencilla. En un tazón grande, mezcla 1 taza de requesón, 2 cucharadas de pasas y 1/8 cucharadita de canela. Sirve como un dip para 2 manzanas rebanadas. Rinde 4 servicios de 100 calorías cada uno. 

Carmen M. Pérez Velázquez